Por Fernando Girasol
Ser feliz requiere de efectividad y para eso les voy a compartir una receta simple que utilizo a menudo en las sesiones de Coaching.

La misma consta de tres etapas.
1. Hacer una lista con todo aquello que tengo pendiente o incompleto. Ejemplos de esto puede ser una charla con alguien que vengo postergando; cambiar un repuesto al auto; pintar la casa; hacer un curso o un viaje; ver una película o leer un libro que me recomendaron; tomar una decisión, etc. Cabe aclarar que terminado no es lo mismo que completo: tal vez terminaste una relación pero quedó pendiente una conversación y por lo tanto eso está incompleto.
2. Dar un orden de prioridades a tu lista. Una vez que estes seguro que ya no hay nada que agregar a tu lista es momento de priorizar. A modo de ayuda suelo recomendar un cuadrante para distinguir por un lado lo que es urgente de lo que no, y por el otro lo que es importante de lo que no.
De este modo los primeros lugares en mi lista de prioridades van a ser ocupados por lo que es urgente e importante. En el medio lo que es urgente y no tan importante, y lo importante que no es tan urgente. Y en los últimos lugares lo que no es ni urgente ni tan importante.
3. Diseñar un Plan de Acciones. Sin acción no puede haber resultados por lo tanto es imprescindible planificar cuales serán las acciones que nos lleven a cumplir nuestros objetivos o al menos nos acerquen a cumplirlos.
Cuando alguien me pide una opinión sobre si tal o cual acción está bien o está mal yo les hago la siguiente pregunta: ¿Esa acción te acerca o te aleja de tu objetivo? Las respuestas correctas siempre están adentro nuestro. Es sólo cuestión de dedicarnos el tiempo para hacer silencio y escucharnos.
Espero que puedan utilizar esta receta para ser más efectivos y felices. Y si todavía necesitan más ayuda, no lo duden: pidan Coaching!
Fernando Girasol es Coach Ontológico Profesional; Periodista y Docente.
Pueden seguirlo en
Twitter: @coachgirasol
Y leer sus notas en: www.coaching-integral.net
Comments